Este mes de Noviembre seguimos con nuestras propuestas “Reto 21 días”.
Muchas de las labores domésticas suponen un gran esfuerzo para tu espalda y acaban dañándote
Por ello en este mes y durante 21 días cada vez que hagamos una tarea doméstica, los primeros días seremos conscientes de que postura ponemos; y nos fijaremos como realizamos dichas tareas, y una vez de ser conscientes de nuestros errores, los corregiremos a medida que vayamos trabajando en dichos quehaceres.
Para ello os proponemos en las tareas domésticas más comunes, la forma correcta de realizarlas… posturalmente hablando:
Barrer y fregar el suelo

La escoba o fregona debe llegar al suelo sin que tengas que inclinarte. Las manos sujetan el palo entre la altura del pecho y cadera, dejando siempre la espalda recta. Hay que mover la escoba o fregona lo más cerca posible de los pies y solo con los brazos, y moviendo la espalda sutilmente de derecha a izquierda pero sin seguirlos con la cintura, para que la espalda se mantenga recta. si tienes que agacharte para el recogedor, siempre desde la cintura con la espalda en recto y sin doblar las rodillas.
Pasar la aspiradora

Intentaremos hacer el tubo lo más largo posible para no tener que flexionar la espalda y poder mantenernos erguidos y nos colocaremos en la misma postura que para fregar el suelo pero flexionando algo más la rodilla avanzada. Al agacharse para pasar la aspiradora por debajo de un mueble, apoya una de las rodillas en el suelo. Vigila que la espalda esté recta y, si la tienes que inclinar, apoya una mano en la rodilla o en el suelo.
Limpiar los cristales
Al usar la mano derecha adelanta el pie derecho y retrasa el izquierdo, apoya la mano izquierda sobre el marco de la ventana y utiliza la derecha para limpiar, si usas la izquierda lo haces a la inversa. Más tarde, cambia la postura y utiliza la mano contraria,
Para limpiar por encima de la cabeza, súbete a una escalera. Vigila que la espalda esté recta, y no coloques nunca el codo por encima del hombro.

Planchar la ropa y fregar los platos

La tabla y el fregadero debe quedar a la altura del ombligo, para poder mantener la espalda recta.
Coloca un pie sobre un reposapiés y alterna un pie y el otro. Al pasar la ropa o los platos de un sitio a otro, hazlo sólo con los brazos, sin mover la cintura.
Recuerda descansar, cambiar de postura…
Trabajar en la cocina
Si tiene que buscar objetos de cocina en armarios al ras del suelo, cambia su distribución.
Lo que más pesa debe estar colocado a un nivel entre tu cadera y tu pecho.
Si tienes que buscar en un armario colocado al ras del suelo, ponte de cuclillas o de rodillas, con la espalda recta.

Hacer las camas

Si la cama está pegada a la pared separarla antes de hacerla. Pon la sábana sobre la cama y fija sus extremos por debajo de las esquinas del colchón de esta forma: ponte frente a la esquina de la cama, con la punta de un pie frente al borde y el otro paralelo al borde que forma la esquina, flexiona las rodillas, levanta la esquina del colchón con una mano y con la otra mano pasa la sábana por debajo.
Fíjate bien en como lo haces y corrige. Son muchas las veces que repetimos esos gestos, hacerlos bien marcará la diferencia en tu espalda.
Aquí os presentamos algunos ejemplos de como se hacen este tipo de tareas y su forma correcta.
